actividad 1
actividad 2 (2º ESO)
Lee con detenimiento el siguiente texto y a continuación responde a las preguntas que se plantean:
¿Por qué las series son tan populares?
Las series de televisión ya no son producciones de segunda categoría: han ganado en calidad y rivalizan con el cine.
¿A quién no le gusta ir al cine con la familia o los amigos y disfrutar de una película con palomitas? Sin embargo, seguro que tampoco nos molestaría pasar una tarde delante del ordenador o el televisor devorando un capítulo tras otro de la serie del momento, con o sin compañía.
La calidad de imagen, los guiones elaborados y la posibilidad de verlas desde cualquier lugar en cualquier momento a través de las plataformas de streaming han convertido las series en un fenómeno de masas con millones de seguidores alrededor del mundo y nos exige hablar de una época dorada de las series.
Hace años, la televisión era considerada una plataforma de segunda categoría no solo por los críticos, sino también por los actores. Según Concepción Cascajosa, profesora de Comunicación Audiovisual de la Universidad Carlos III de Madrid, los salarios eran peores en la televisión y el compromiso era más alto, porque una serie podía durar varias temporadas.
Pero la situación empezó a cambiar a partir de los años 80 en Estados Unidos. Series como ‘Canción triste de Hill Street’ y ‘Twin Peaks’ dieron prestigio a la televisión, y la tendencia siguió con producciones como ‘Los Soprano’ y ‘A dos metros bajo tierra’.
El mundo del cine destaca por los grandes presupuestos, la popularidad de sus estrellas y toda la fama que lo rodea. Sin embargo, una de las principales limitaciones a la hora de hacer películas es su duración. Seguramente, la película más larga que hayamos visto dure entre tres y cuatro horas.
En cambio, la temporada de una serie de televisión puede extenderse fácilmente hasta 10 horas. Tener más tiempo permite desarrollar mejor a los personajes y prestar mayor atención a los detalles de historias complejas.
Antes, las series se emitían en un día y hora concretos: si no podías ver un capítulo, te perdías parte de la historia. Sin embargo, la aparición de los servicios de contenido por streaming, como HBO o Netflix, cambiaron nuestra manera de consumir contenidos audiovisuales, ofreciendo películas y series a la carta, que en muchos casos ellas mismas producían.
Poder contar con internet para distribuir las series ha permitido que espectadores de todo el mundo sigan las mismas producciones a la vez y puedan compartir su experiencia en la red. Eso ha ayudado a convertir algunas producciones, como ‘Juego de tronos’, en fenómenos globales.
Laia Ros, La Vanguardia (22/05/2019) [adaptación].
Actividad 3 (2º eso):
ACTIVIDad 2 (3ºESO):
Lee atentamente el siguiente texto:
Los héroes de hoy, como los antiguos, también van armados con una lanza para matar al dragón que tiene cautiva a una bella princesa. En este caso la lanza es el teléfono móvil, que concede al adolescente un gran poder. El whatsapp transforma al cobarde en valiente, al tímido en audaz, al tonto en listo, al tipo duro en un castigador ilimitado, solo que en estos ritos de iniciación también las princesas cautivas usan la misma arma y ya no necesitan ayuda de ningún héroe para escapar del dragón. Tanto ellos como ellas saben que sin el móvil no son nada. No creo que exista ningún adolescente que al darse cuenta en medio de la noche que ha olvidado el móvil no se sienta un guerrero desnudo, desarmado y trate de recuperar a toda costa su lanza.
La esencia de esta nueva arma es la inmediatez. En los whatsapps la rapidez en responder a las llamadas es más determinante que el contenido de los propios mensajes. Si no contestas de forma instantánea puedes quedar fuera de combate, puesto que los mensajes de la amiga, del amante, del novio, del descocido se acumulan, se superponen y serás inmediatamente suplantado. Tener el móvil apagado engendra una suspicacia morbosa en la pareja, que puede desembocar en una tormenta de celos si no estás permanentemente conectado. Antes los enamorados se eternizaban en la despedida por el viejo teléfono. Cuelga tú; no, cuelga tú; anda, cuelga tú. En cambio, hoy los móviles se diseñan para poder expresar una idiotez cada día un segundo más rápido. La neurosis de los mensajes superpuestos, inmediatos ha llegado al extremo que muchos adolescentes y también adultos perciben que les vibra el móvil en el cuerpo aunque lo hayan dejado en casa. Esta falsa vibración es un síndrome de la necesidad de esa llamada, de esa respuesta, real o imaginaria, que se espera con angustia, sin la cual uno se siente solo en el mundo.
Manuel Vicent, “La lanza”, EL PAÍS, 2013.
CUESTIONES
Los héroes de hoy, como los antiguos, también van armados con una lanza para matar al dragón que tiene cautiva a una bella princesa. En este caso la lanza es el teléfono móvil, que concede al adolescente un gran poder. El whatsapp transforma al cobarde en valiente, al tímido en audaz, al tonto en listo, al tipo duro en un castigador ilimitado, solo que en estos ritos de iniciación también las princesas cautivas usan la misma arma y ya no necesitan ayuda de ningún héroe para escapar del dragón. Tanto ellos como ellas saben que sin el móvil no son nada. No creo que exista ningún adolescente que al darse cuenta en medio de la noche que ha olvidado el móvil no se sienta un guerrero desnudo, desarmado y trate de recuperar a toda costa su lanza.
La esencia de esta nueva arma es la inmediatez. En los whatsapps la rapidez en responder a las llamadas es más determinante que el contenido de los propios mensajes. Si no contestas de forma instantánea puedes quedar fuera de combate, puesto que los mensajes de la amiga, del amante, del novio, del descocido se acumulan, se superponen y serás inmediatamente suplantado. Tener el móvil apagado engendra una suspicacia morbosa en la pareja, que puede desembocar en una tormenta de celos si no estás permanentemente conectado. Antes los enamorados se eternizaban en la despedida por el viejo teléfono. Cuelga tú; no, cuelga tú; anda, cuelga tú. En cambio, hoy los móviles se diseñan para poder expresar una idiotez cada día un segundo más rápido. La neurosis de los mensajes superpuestos, inmediatos ha llegado al extremo que muchos adolescentes y también adultos perciben que les vibra el móvil en el cuerpo aunque lo hayan dejado en casa. Esta falsa vibración es un síndrome de la necesidad de esa llamada, de esa respuesta, real o imaginaria, que se espera con angustia, sin la cual uno se siente solo en el mundo.
Manuel Vicent, “La lanza”, EL PAÍS, 2013.
CUESTIONES
- ¿Qué es lo primero que se te ha venido a la mente durante la lectura del texto?
- ¿Qué crees que persigue Manuel Vicent con su escrito? Justifica tu respuesta.
- ¿Te parece original el modo o estilo que ha empleado para presentar sus ideas? Extrae las expresiones que hayan llamado tu atención y comenta por qué.
- ¿Crees que su mensaje va dirigido únicamente a un sector de la población o a la sociedad en general? Razona tu respuesta.
- ¿Te has sentido identificado o has presenciado en otros algunas de las situaciones que se presentan en el texto? ¿Con cuáles?
- Teniendo en cuenta todas las respuestas anteriores, explica con tus palabras por qué el texto es argumentativo.
- Redacta un texto argumentativo: ¿Qué opinas del uso que hacen los jóvenes del teléfono móvil en la actualidad?